La Galería Salvador Núñez, frente al museo Reina Sofía acoge el último trabajo de la artista Marina Nuñez. Se trata de una visión contemporánea de un espacio recurrente en nuestra sociedad occidental: el Infierno.
Nos lo presenta como referencia de los miedos actuales, marcados por el avance genético y de las nuevas tecnologías, así como de las nuevas formas de comunicación.
Se compone de series de piezas, entre las que encontramos cajas de luz con representaciones del infierno. Se trata de ilustraciones digitales con integración de 3D retroiluminadas y de gran formato. Encontramos también videoproyecciones de enormes proporciones que hacen alusión al mito de Ícaro y el Angel Caído.
Muy interesante en cuanto al punto de vista semántico. Es una exposición que sorprende por lo crudo de sus imágenes, un tanto escatológicas, pero de gran belleza. El individuo se siente conmovido y pequeño ante las proyecciones. En cuanto a la técnica, resulta totalmente acertado la realización digital, que otorga a las piezas una contextualización efectiva con las creaciones audiovisuales contemporáneas.
Me ha gustado mucho esta exposición.
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